jueves, 26 de diciembre de 2019

En jaulas

En la calle La Pelota, cerca del Teatro Guiniguada que en tiempo llevó el nombre de cine Avellaneda podemos encontrar una tienda algo antigua en la que venden, como si fuera altramuces, pájaros y algunas aves de corral. La tienda, que es una Pajarería como reza el cartel que la anuncia, no sabemos si es un negocio próspero pero, por lo que se puede deducir, al menos se mantiene. Casi siempre, cuando por allí pasamos, vemos en el pequeño negocio unas cuantas personas que muestran interés por los pajarillos o por las gallinas o gallos expuestos. Hoy hemos visto a un par de gallos en jaulas justo en la puerta y no hemos podido dejar de sentir lástima al ver encerrado en tan pequeños espacios a tan lindos animales.

viernes, 13 de diciembre de 2019

Las tallas

En Escaleritas, en una plaza que en tiempos llevó el nombre del aguerrido guerrero Doramas había junto a una pared en la que estaba y está la puerta de un bar dos tallas como si dos ánforas romanas se trataran. En estas tallas podían verse una enredadera, que sumaban dos preciosas buganvillas, que dejaban subir sus ramas con flores por la pared, de forma lujuriosa, dando un punto de color a la fachada. Hoy en día, las macetas continúan (pesadas son para que alguien se decida a llevárselas) aunque ahora de sus bocas no salen las enredaderas pues están sus bocas segadas. Alguien con buena maña las taponó con mortero y son unas sepulturas en las que no entran, probablemente, ni el aire. Nosotros nos atrevemos imaginar su interior a través del cemento que las cubren y creemos oír los lamentos de las raíces de las pobres buganvillas tal vilmente maltratadas.

sábado, 30 de noviembre de 2019

Buzón

Una calle céntrica en la zona de Triana tiene unas aceras que no son anchas ni son estrechas sino todo lo contrario. Por la acera de la izquierda, según se sube, pueden ir bien una pareja de enamorados  cogidos de la mano o con sus brazos entrelazados. Pero, siempre hay un pero, desde tiempo de maricastaña hay en dicha acera un buzón de correos que corta el paso y con él el idilio de quienes transitan tranquilamente. Estamos seguros de que alguna función cumple tal buzón en tal sitio. Estamos convencidos de la inocencia de tal elegante trasto, pero -siempre hay un pero- ¿no podría el Ayuntamiento hacer lo posible para recolocarlo en otro lado?

domingo, 17 de noviembre de 2019

Recuerdos

Nuestro hombre acarrea en la carretilla unas cajas en las que, pensamos, lleva sus recuerdos. Son estos tantos que el hombre va algo encorvado y de su disco duro de la memoria extraerá situaciones y sentimientos. Su mirada la dirige al suelo y no al frente quizás evocando las cosas que han marcado su vida. ¿Qué rumiará en sus pensamientos? ¿Cuántos momentos felices, cuántos abrazos, cuántos besos le brotarán del alma en estos momentos? ¿Qué fue de su niñez, de su juventud, de sus años enteros? Hoy el hombre parece viejo pero de su vida no cambiaría, si ello le fuera posible, ni un mal momento. Nuestro hombre camina, y en su carretilla lleva -pensamos- sus recuerdos. 

sábado, 2 de noviembre de 2019

La hamaca

Día uno de noviembre -día de Todos los Santos-
con un calor de todos los demonios. La gente en la playa, poca o mucha según se mire, había estado gozando de este veroño como algunos le llaman. Agosto se nos había colado por la puerta trasera y no era cuestión de desaprovecharlo. Algunos querían quedarse a dormir aunque la noche parecía venir con tarozada y buscaron la forma de estar calentitos uno junto al otro. Nada mejor que una hamaca entre dos palmeras que en la playa andan y así, acurrucaditos, verían pasar las horas que el atardecer se llevaba. 

sábado, 21 de septiembre de 2019

El viejito

Al pasar por lo que fue Puente de Piedra, hoy parte del techo que le echaron al Guiniguada, vemos en sus cuatro pedestales a las esculturas que nos recuerdan que son cuatro las estaciones del año. Esculturas blancas moteadas de polvo por el paso del tiempo, preciosas y sugestivas. A nosotros nos gustan las cuatro pero tenemos debilidad por la del invierno. Quizás o sin quizás porque ya estamos en nuestro propio invierno, el invierno de nuestras vidas. Representa esta escultura a un hombre cargado de años. A un venerable anciano con barbas blancas, expresión serena y túnica larga. A un viejito que a saber qué guarda en el recipiente que mantiene en su mano izquierda mientras mantiene la derecha alzada; quizás guarde los recuerdos de sus muchos años.

jueves, 12 de septiembre de 2019

Cenizas



Hemos visto el cartel anunciador de las fiestas de Teror 2019 y nos ha gustado mucho. Es un dibujo sobre cuadriculas de distintos colores de la Virgen y el Niño que presenta la particularidad de mostrarnos sus bellos rostros con señales negras, de cenizas, (que da la impresión de que al Niño le ha salido bigote). Es un recuerdo, creemos, de los incendios que nos han mortificado tanto en los últimos meses y que han dejado sus negras huellas en la isla. Seguramente el autor del cartel ha querido decirnos que las llamas han llegado hasta el santuario de la Virgen lo que es tanto como haber llegado hasta su corazón de Madre. Ahora a la Virgen y a su Hijo, a nuestra Virgen del Pino, la van a llevar a los municipios afectados en acción de gracia porque no hubo que lamentar desgracias personales pese a la aparatosidad y el destrozo de las llamas. Bienvenidos sean en todos ellos.

viernes, 6 de septiembre de 2019

Imagen

Una imagen vale más de mil palabras, nos dicen. Y es que no siempre hay palabras para describir lo que se siente, como nos ocurre al ver en los árboles de Las Canteras la presencia activa del viento. Estos árboles, que viven por donde los surferos encuentran en las olas su razón de ser, se encuentran sometidos -cual sabinas en El Hierro- a la acción continua de un airecillo constante que con su empuje hace que se camben sin llegar a troncharse. Es contumaz el viento pero también lo es el árbol que no ofrece más resistencia de la necesaria. Así juegan un día y otro mostrando uno al otro un mutuo respeto.

domingo, 25 de agosto de 2019

Hidroavión

El voraz incendio que ha calcinado buena parte de nuestras cumbres nos ha traído a la ciudad un cierto punto de novelería, de curiosidad, de alegría por ver algo que nos saca de nuestras a-isla-das rutinas. Así, cientos de personas se han desplazado en estos días para ver las maniobras de los hidroaviones para amarar, repostar y volver al cielo para llevar agua con que apagar las llamas de los pinares. Nosotros no hemos ido pero sí hemos visto el espectáculo de los curiosos espectadores pegados a la marea, al pasar en la guagua por la Avenida Marítima. Y también gozamos con la vista de estos aviones sobrevolando Las Canteras rumbo a su destino en las cumbres.

domingo, 18 de agosto de 2019

Las ranas

Las ranas, una frente a la otra, trabajan incansables expeliendo agua por sus bocas. Cumplen así el contrato que les une a esta ciudad nuestra que a cambio le ofrece un lindo estanque para ellas solas. Son ranas graciosas a la par que simpáticas sobre todo con los niños y los abuelos que por allí se acercan. A las personas de mediana edad no les hacen mucho caso pues éstas, ya sabemos que siempre pasan pensando en sus cosas cuando no en las musarañas. Tienen las ranas los ojos saltones bien abiertos y las patas escarranchadas. A lo mejor, últimamente se aburren pues por su plaza -por la Plaza de las Ranas- ha dejado de pasar mucha gente joven después que la cercana Biblioteca Insular cerrara su puerta principal de siempre cambiándola por otra en la calle paralela que lleva el nombre de Remedios. ¡Qué remedio, dirán las pobres ranas sino aburrirnos!

domingo, 28 de julio de 2019

Tricolor

18 de julio en Triana. Año 2019. Unas pancartas en las farolas recuerdan a la República y una presencia inusual de la Policía Nacional, pequeña, puede verse en la calle. La gente a lo suyo, pasea y entra o sale de los comercios. Personas mayores, como siempre, ocupan los bancos puestos ahí para el descanso. Extranjeros se mezclan con los nativos y algunos de ellos van con niños pequeños, muy pequeños que empiezan a caminar, que son una delicia. Difícil saber si alguien se percata del hecho de que en las pancartas figura la bandera tricolor. Estamos por pensar que los extranjeros ni siquiera saben su significado y que el común de los paseantes ni se fijan en ella. Salvo, claro está, algún nostálgico que pueda haber, que haberlos haylos.

martes, 9 de julio de 2019

Alfombras

El barrio capitalino de Escaleritas tiene concedido el celebrar la procesión del Corpus a los ocho días de que se celebre en Vegueta alrededor de la Catedral. Por ello vecinos y vecinas de las casas cercanas a la iglesia de Santa Isabel de Hungría -la iglesia del viejo barrio primero- llegada la fecha cumplen con la tradición de confeccionar las alfombras de flores, que ahora son de sal o de lo que la imaginación y las posibilidades les sugiera. Así, la alfombra de un colegio de la zona que con la dedicación de los niños hacen maravillas con papeles de colores. Las vecinas y los vecinos ponen todo su empeño y las calles quedan preciosas, aquellas calles por las que en la procesión de la tarde pasará el Cuerpo de Cristo.

domingo, 30 de junio de 2019

Orlas

Los niños y los jóvenes tienen derecho a su ratito de gloria; claro está, las jóvenes y las niñas también. Por ello, todos nos hemos puesto de acuerdo en que desde la infancia hasta la pubertad todos, toditos, todos, tengan su orla como Dios manda. Todos así lo queremos, familias y docentes. Pasan la orla los pequeñines cuando acaban sus 'estudios' en la guardería. Lo pasan los mayorcitos al pasar el ciclo de la EGB (o como se llame ahora), el de la ESO, el Bachillerato, la FP y cuantos otros se nos hayan olvidado. Lo celebran todos ellos aquí y allá en sitios verdaderamente guays. Así, los alumnos de bachillerato del I.E.S. de Los Tarahales -los de 4º y los de 6º- tuvieron sus ratos de gloria y de emoción en el Auditorio Alfredo Kraus en una ceremonia celebrada con ilusión y desparpajo. Para ellos y ellas, y para sus padres y abuelos que allí estábamos para aplaudirles y animarles.

martes, 25 de junio de 2019

Fuegos

La gente bajó la voz y comenzó a hablar en susurros y a lanzae apagadas exclamaciones cuando los dos voladores que anunciaban los fuegos tronaron en el cielo. Las miradas se volvieron a lo alto para seguir el caleidoscopio de colores que se abría una y otra vez sobre nuestras cabezas siguiendo el ritual  mágico de la noche de San Juan. Amparados por la oscuridad sobre las aguas de la marea que en contraste con la luz de las luminarias de la avenida nos invitaban a un baño, esperábamos adivinar cuando una de las muchas formas de colores nos mostraría a la palmera. A las palmeras. Porque nadie se va completo, por muchas figuras y cascadas fosforescentes que vea en el cielo, mientras no vea a la majestuosa palmera que se desgaja en el firmamento. Nuestro pequeño cacho de firmamento sobre Las Canteras.


sábado, 22 de junio de 2019

Muñequitos

El muchacho hacía bailar a sus muñequitos como si fueran bailarines de claqué o del mas profundo flamenco mientras tocaba la flauta. Estaba en la calle Triana que se ha convertido en escaparate de artistas urbanos que nos quieren manifestar su arte. Estuvimos un rato parado delante de él compartiendo su música y viendo como, moviendo rítmicamente su rodilla izquierda y el pie, los pequeños muñecos le obedecían. Era digno de ver su empeño de que todo saliera superbien como en un concierto de verano. Naturalmente todo fue de maravilla. No cabe duda de que la calle de Triana se nos ha convertido en un delicioso teatro.

miércoles, 19 de junio de 2019

Boleros

El bolero, la canción de amor por antonomasia, es desde siempre muy apreciado en nuestra ciudad. Aquí, quien mas y quien menos ha cantado o ha tarareado algunos de ellos. No es de extrañar por tanto que cuando se celebra en la plaza de Santo Domingo, en Vegueta, la Noche de los Boleros una notable concurrencia llena sillas y muros para sentarse y gozar del concierto y otros muchos espectadores se tienen que conformar con gozarlo de pie. Tal ocurrió el pasado viernes en que estuvimos nosotros deleitándonos con la música y canciones de excelentes intérpretes con dos grupos de Tenerife y el otro de nuestra isla, como -estamos seguros- el sábado en que no pudimos asistir. Se celebraba el 11º encuentro que da muestra de la solidez del evento que viene a ser un acto más -no sabemos si a postas- de los festejos que se celebran en Las Palmas de Gran Canaria por sus Fiestas Fundacionales

lunes, 10 de junio de 2019

Los patios

Los patios de Vegueta acogieron una vez mas los miniconciertos programados con motivo de las Fiestas Fundacionales de Las Palmas. Estuvimos en tres: en La Casa de Colón, en el Patio de los Naranjos y en la Sede de la Fundación Negrín. Tres conciertos distintos con músicas distintas que nos dejaron un regusto de felicidad. Canciones como Lágrimas negras, Alma llanera y Luz de luna en el primero; canciones líricas en el segundo con una excelente soprano y dos jóvenes músicos -mujeres- acompañantes con violín y piano en el segundo; y música de mestizaje en el tercero con un cantante estupendo y un sobresaliente contrabajista.

De pena fue -nos amarga el decirlo- la falta de respeto a artistas y público en el Patio de los Naranjos; no sabemos el por qué, el securita de la puerta dejó pasar a todo quisque durante todo el concierto con las consiguientes molestias. De verdadera pena, usted.   

domingo, 9 de junio de 2019

La pasarela

El istmo que une a La Isleta con el resto de la isla (no sabemos si en su día estarían separadas) era mucho más estrecho que en la actualidad. La mano del hombre se ha ocupado de ello y ya no podemos gozar de la visión del agua del mar pasando de Las Canteras a la bahía o al revés, como era posible ver en mareas muy altas, hasta bien avanzado el siglo pasado. La mano del hombre modifica a la naturaleza y, esa mano, va a poner ahora una pasarela que salve el río de coches que discurre por aquí permitiendo el tránsito de personas por arriba de la autovía. Ya lo veremos. Por lo pronto hemos podido ver el andamiaje de acero de la tal pasarela -que han traído de Sevilla- en el suelo, esperando su montaje. La hemos visto por la zona del Mercado del Puerto, lindo entramado de hierro, éste, que desde tiempo ha tenemos en el istmo. Todo sea por los cruceros y cruceristas...

jueves, 6 de junio de 2019

El nombre

El nombre de un local de la zona turística de Santa Catalina nos ha llamado la atención. "Besito volao", dice el cartel junto a otros que, en cuatro idiomas distintos, dan la bienvenida al visitante, que es por supuesto, también, posible cliente. Nos ha gustado el nombre y lo repetimos: Besito volao, que viene a ser algo parecido a un beso robado de aquellos antiguos besos no maliciosos. El local, con artículos varios, es pequeño pero parece bien surtido en aquellas cosas que al viajar nos gusta llevar de recuerdo sin ser souvenirs. Cuando estuvimos en su puerta, una señora de espalda, ¿propietaria, dependienta? se ocupaba en colocar una prenda de vestir a un maniquí. No quisimos importunarla. Sacamos la foto y andando que te andarás seguimos hasta el cercano parque a coger la guagua.

jueves, 16 de mayo de 2019

En lo alto

Subimos a lo más alto del barrio de San Juan en busca de nuevas fotografías. Subimos a esta parte conocida como Ladera Alta y aun más arriba en donde nos encontramos con un depósito de agua potable que gestiona Emalsa y que sirve seguramente para garantizar el agua a los tres barrios de más allá del Guiniguada: San José, San Juan y San Roque y, posiblemente también, al señorial barrio de Vegueta. Mas allá, pero no más alto, está la Batería, o sea, lo que queda de esta instalación militar que presenta un aspecto deplorable con los huecos vacíos de puertas y ventanas, con habitaciones o cuartos vacíos que en su día serviría de dormitorios y comedores, con alguna escalinata y una rampa para salvar pequeñas alturas y con cuatro semicírculos para los potentes cañones con pernos oxidados en el suelo que seguramente servían para afianzarlos. Es lo que más nos impresionó. Se divisa desde este alto y encaramado sitio una magnífica panorámica de la ciudad y del mar. Casi a la mitad podemos divisar la catedral de Santa Ana que vista desde aquí, a ojos de pájaro, parece cosa pequeña, como de juguete.

domingo, 12 de mayo de 2019

La Cruz de mayo

El pasado día 3 de este mes de mayo, fiesta de la Exaltación de la Santa Cruz, nos topamos en alguna casa despistada, de alguna calle, con una cruz adornada con flores. en su fachada. Teníamos nosotros la costumbre -desaparecida casi- de colocar estas cruces por todas partes coincidiendo con esta fecha de carácter religioso, hoy llevada a menos. Eran otros tiempos y ya se sabe que todo tiempo pasado fue mejor. Así que hoy las pocas cruces que algunos vecinos se atreven a colocar parecen mostrarse con timidez. Cierto es que la mayoría vivimos en bloques de viviendas y que los pisos altos no se prestan para ello. ¡Pero qué lindo sería el mantener las costumbres lindas en la que queremos sea linda ciudad! 
 

martes, 30 de abril de 2019

El Museo

El Museo Canario nos invita a visitarlo de vez en cuando. No vamos a esta venerable institución con la frecuencia que debiéramos para ver los objetos allí guardados de quienes estaban antes que nosotros en la isla, ni vamos con frecuencia a darles a ellos un saludo pues ellos están allí modificados. Singularmente modificados. Sí vamos a retomar datos y noticias de tiempos mas recientes a través de la hemeroteca del Museo. Nos adentramos en noticias que en su día fueron importantes para los habitantes de entonces en la ciudad y en la isla, y en anuncios que proponían, por ejemplo, pasarse a la plancha eléctrica... ¡benditas planchas de carbón! y nos enteramos de qué pasatiempos podían encontrar entonces lo palmenses incluyendo, cómo no, la cartelera de cine de un día ya lejano. 

En nuestra última visita algo nos llamó la atención, no dentro del Museo sino fuera. En la pared junto a la entrada, unas palabras nos hicieron cosquillas pues proclamaba ser algo bueno: "un lugar donde vivir". Pensamos que ya, ahora, con este eslogan, las momias del Museo vivirán estupendamente bien, como los ángeles.

jueves, 18 de abril de 2019

El pato

Hay veces en que sin querer hacemos el pato. O sea, que metemos la pata. Bien metida, hasta el fondo, en ocasiones. En tales casos, unas veces quisiéramos que nos tragara la tierra y en otras, más benevolentes nosotros con nosotros mismos nos reímos de nuestra metedura de pata. Otras veces hacer el pato no es meter la pata sino hacer el indio, dejar traslucir lo que somos, aquello que, para que nadie se dé cuenta de que somos unos tarugos, procuramos esconder a la vista de todos.

Alguien pintó un pato en una calle de las mas serias de la ciudad justo al lado de un colegio religioso. Al hacerlo, quizás, no estamos seguros, hizo el pato. Aunque, tal vez, no: solamente pintó un pato.

lunes, 8 de abril de 2019

Medio siglo


Medio siglo atrás, o mas aún, teníamos un cine en cada calle o por lo menos en cada barrio de la ciudad. En aquellos tiempos, los palmenses de media pela y con pocas perras) teníamos escasas oportunidades de diversión. Bien es verdad que había sitios a donde ir a bailar, que teníamos el fútbol y la vela latina y el boxeo y los galgos (los gallos creemos que no) para ayudar en los ratos de asueto. Pero en ese tiempo de posguerra lo que de verdad servía de evasión para todos -o casi- era el cine al que acudíamos para ver las grandes películas de las famosas estrellas. 

Al barrio de San José no le faltaba su cine;  este tenía por nombre Torrecine no porque la casa en que estaba fuera una torre sino más bien, creemos, por el apellido de su dueño. De ello nos hemos acordado al ver en una esquina de calles de mas allá de la Portadilla el nombre del Torrecine, esta vez como nombre de un bar. Y nos entró, claro está, la morriña por el pasado que añoramos. 

miércoles, 3 de abril de 2019

Castaño

Hemos subido al barrio de San Juan -uno de los tres barrios risqueros de mas allá del Guiniguada- en busca de la Batería que lleva su nombre. Primero en guagua recorrimos un buen trecho por su calle principal y luego, por la misma calle seguimos pateando cuesta arriba bastante empinada, lo que era un disgusto. Nos extrañó la falta de árboles. Sólo pudimos ver una palmera en una calle paralela (y unas flores en un balcón o ventana) y otra palmera, su cogollo más bien, a modo de espejismo. En ésas andábamos cuando en una esquina con otra calle no sorprendió, dando por bueno el refrán de que quien no se consuela es porque no quiere, ver el rótulo maravilloso del nombre de un árbol: castaño. Castaño, decía. Y mas adelante otro letrero decía madroño. No pudimos dejar de reír por estos encuentros sorprendentes y cariñosos.
   

sábado, 30 de marzo de 2019

Amarillo

Un chiste, no de ayer sino mas bien de antier, decía que el amarillo es el color verdadero; (el padre había muerto de fiebre amarilla). Opinamos nosotros que sí y que es cosa de creer que los responsables municipales de los jardines en Escaleritas, conocían tal aserto cuando decidieron plantar en uno de los parterres las semillas necesarias para que con el tiempo las flores que allí íbamos a ver fueron amarillas. Y atinaron. Hoy, al inicio de la primavera podemos ver un seto de verdes plantas y amarillas flores con un tono no chillón sino sumamente suave. Plantas que transmiten serenidad en estos tiempos de tantas tontunas.

jueves, 21 de marzo de 2019

Enamorado

Hoya del Enamorado. Romántico nombre de calle, en nuestra ciudad. Evocador. Enamorado: un solo enamorado que bien pudieran ser un millón. ¿Quién será este ser que ha merecido el honor de poder verse señalizado? ¿Hombre, mujer, joven, mayor?... ¿Niño o niña aún? Nos preguntamos si este enamorado (o enamorada) habrá sufrido al sentirse herido por la dulce flecha con que Cupido le alcanzó; si en su cuerpo todo habrá sentido los escalofríos y los ardores del miedo; si en su mente tuvo lugar la batalla sublime y  desesperante de la inseguridad. 

¿Me quiere? ¿No me quiere? ¿Sí? ¿No? Mucho. Poco. Nada... se habrá preguntado, y la duda le habrá corroído el alma. 

miércoles, 13 de marzo de 2019

El Pensador

Martín Chirino se nos ha ido y ahora estará haciendo virguerías con el hierro en el cielo. Seguro que andará enfrascado con espirales, ladies y pensadores y dando forma a otras muchas esculturas alineando por aquí y desbastando por acá el metal de sus amores. Allá arriba, donde está por derecho propio tiene consigo toda la inmensidad para que sus creaciones no le queden pequeñas por falta de espacio ni de tiempo. Hará reproducciones enormes de su Lady Harimaguada a las que pondrá no contra el azul del mar sino contra el azul celeste del cielo, se entretendrá con inimaginadas espirales, y envolverá entre blancas nubes la cabezota de su Pensador para envolver con ellas todos los pensamientos. Descanse en paz el maestro.

lunes, 11 de marzo de 2019

Ser mujer

Nuestra ciudad cuenta desde poquito p'acá con una nueva  escultura. La han puesto en una plazuela de la Ciudad Alta, en Escaleritas, allí en donde estuvo el mercado de este barrio en sus principios y que hoy es Centro Municipal de la Mujer. Así es natural que la escultura represente a una mujer y haya sido modelada por varias mujeres. Pusieron la escultura en este su sitio coincidiendo con el Día Internacional de la Mujer el pasado día 8 de marzo sin alharacas y sin presencia alguna de autoridades, que sepamos. Quizás porque tenemos unas elecciones generales para pronto y no estarán, tal vez, permitidas las inauguraciones de ningún tipo. La escultura, al pronto, recuerda al ídolo de Tara y ha quedado muy linda con un bello torso distorsionado de mujer. Porque la mujer lo merece, por ser mujer.

viernes, 8 de marzo de 2019

Granito

La impresionante pared de rocas que podemos ver al entrar en la ciudad por el sur son a nuestro parecer de ignorantes en la materia, de granito. Forman una muralla granítica que antes teníamos la posibilidad de ver también al enfilar el túnel que por aquí había (primero pequeño que enamoraba y luego algo mayorcito para tanto coche) en nuestros desplazamientos hacia los mares del Sur. Son de una belleza sin par que bien podría figurar en el escudo del Cabildo de nuestra isla canariona y que deberían ser mostradas con orgullos en postales y revistas dedicadas al turismo. Suponemos que de ellas se han realizado estudios y se habrá escrito con devoción. Son lindas aunque pasen desapercibidas. Pensamos que es un buen ejercicio para la vista y la mente el verlas, y para ello nada mejor que acercarse a la playa de arena negra de La Laja, o a su paseo, y dando la espalda al mar, dejadnos subyugar por estas ciclópeas rocas.

martes, 5 de marzo de 2019

La oveja

Ver una oveja en la ciudad, nos ilusionó. Por un momento nos sentíamos vivir en las altas cumbres en que vivían Heidi y Pedro con pastos floridos en las montañas y valles. Fue una ilusión pasajera que lamentamos perder al volver a la burda realidad. Nuestra oveja estaba en la puerta de un establecimiento tal que si estuviera en la puerta de su establo. Tan linda, tan bonita, que era un primor, Sus ojos negros, saltones, sus largas orejas, su moño redondo cual bonete de cura, hacían juego con el esponjoso ropaje que envolvía su orondo cuerpo. Nos paramos a verla y quisimos saber su nombre, nombre que posiblemente estaba escrito en el cartel que llevaba colgado de su cuello. Se lo preguntamos en lugar de intentar leerlo y nos contestó con ovejuna dulzura: Beeee, Beeee, Beeee. Y ya nos fuimos sin mirar atrás.

sábado, 2 de marzo de 2019

Luna

Hace bien poco, quiso la luna ponerse guapa para venir a visitarnos a nosotros los palmenses. Se vistió con encajes de nubes en una noche del disparatado febrero pasado, de calores impensables, y se nos mostró en todo su esplendor de plenilunio mientras jugaba al escondite con las nubes. Nosotros pudimos verla y quisimos capturarla y dócilmente se dejó alcanzar. Brillante, enormemente brillante. Linda, majestuosamente linda. Luna de nácar y coral. 

martes, 26 de febrero de 2019

Mas que un pasatiempo

Es mas que un pasatiempo. Creemos saberlo y por ello acudimos, cuando por ahí nos da, a participar con nuestra presencia de espectadores poco entendidos a alguna de las variadas exposiciones de arte que nos son ofrecidas en nuestra ciudad. Hace pocas semanas estuvimos en las salas de la Fundación Mapfre y salimos regocijados al ver la variada muestra que exhibían fruto del trabajo de diferentes artistas. Puestos a elegir una obra nos decidimos por la del cartujo en la escalera obra que fue bautizada así por nosotros y de la que desconocemos el nombre que le fue dado por su autor. Era un cartujo sin cara y era una escalera sin sujeción, pero, en su sencillez, nos pareció una obra llena de encanto e ilusión.   

viernes, 22 de febrero de 2019

Flores

En el coqueto parque de San Telmo, cercano a la ermita de igual nombre, hay un parterre en el cual hemos visto un hermoso ramillete de flores. Parecía un gran ramo de enamorado o enamorada a su amor, por el día de los enamorados. En medio de las flores nos pareció ver la imagen de Valentín, su santo patrono, aunque a ratos nuestros  pensamientos iban hacia el dios Cupido con su carcaj y con la flecha preparada para lanzarla en busca de aquel o aquella que con su disparo, sería ya para siempre (si el tiro no va hacia otra diana) inmensamente feliz.  

domingo, 17 de febrero de 2019

La palma

El escudo de nuestra ciudad, en el que podemos ver un león, dos castillos, dos canes y dos palmeras en su parte central, además de una corona con piedras preciosas en su parte superior y siete pares de espadas en el intermedio, tiene una linda leyenda que nos dice: SEGURA TIENE LA PALMA. Por ello, porque están seguras, tal vez, todo queda enmarcado con dos pencas de palmeras; para que no queden dudas. Pensábamos en ello cuando bajando por la calle Domingo J. Navarro hacia Triana vimos una penca amarillenta y seca descansando de su humilde oficio de barrendera. La habían colocado, alzada hacia el cielo, en un bolardo de plástico verde con tiras blancas de señalización viaria. Pensamos: ¡ahí está, ahí está segura nuestra palma! Y seguimos con la tranquilidad que nos transmite la seguridad manifestada en nuestro querido escudo municipal.

lunes, 11 de febrero de 2019

Lazos

En el parque, un árbol; en el árbol, un tronco; del tronco, las ramas; de las ramas, las hojas; y visibles, adelantando el San Valentín, dos lazos que seguramente hablan de amor. De siempre hemos sabido que los enamorados graban un corazón en el árbol junto a sus iniciales, corazón y letras que van creciendo según crece el tronco del árbol. ¿Crecerán también los lindos lazos que hemos descubierto en el parque? Pensamos que sería una pena si no fuera así, pues ésta es  una nueva y bonita forma de mostrar el amor.  

martes, 5 de febrero de 2019

Colores

Una canción, en la que los colores son protagonistas, nos dice que de colores se visten los campos en la primavera, que de colores son los pajaritos que vienen que afuera y también el arcoiris que vemos lucir. Tal canción, con un ritmo pegadizo muy lindo nos sigue hablando de grandes amores de muchos colores...

En nuestro deambular por el Cono Sur de la ciudad vimos con agrado dos edificios distintos y en distintos lugares, dedicados a la enseñanza, pintados con vivos colores. Y ello nos trajo el ronroneo de tal canción al magín al tiempo que nos hizo recordar aquella casa de pisos de la calle Tomás Morales (en donde estuvo un tiempo la casa de socorro) que recién construida fue pintada con colores distintos en cada una de las partes en que dividieron la fachada, casa a la que llamamos rápidamente "de los retales". 

Entonces y ahora, como vemos, nuestra ciudad se viste de colores.

domingo, 3 de febrero de 2019

Rejas

"De amor en los hierros de tu reja. De amor escuché la triste queja"... Nos dice la vieja canción que por título lleva el bonito nombre de Amapola. Sin darnos cuenta, comenzamos a tararear esta dulce melodía al ver en una calle de Schamann un geranio florecido junto a una reja, mientras la letra que habla de amores, "igual que ama la flor la luz del día" íbamos recordando. 

"Amapola, lindísima amapola", fue desde entonces, para nosotros, la canción del día...

jueves, 31 de enero de 2019

Cosas

Cosas y más cosas podemos encontrar deambulando por aquí y por allá. Por aquí, por los barrios del centro de la ciudad; por allá, por los otros, los barrios periféricos. A estos últimos nos gusta ir en busca de cosas. Como las que encontramos el otro día en la azotea de una casa terrera en el barrio que llamamos Pedro Hidalgo. Fue alzar la cabeza desde la acera más alejada para ver aquello que nos estaba permitido ver. Otras cosas habrá, nos dijimos, que quedan fuera de la vista de los paseantes. Pero a nosotros nos bastó con lo que vimos para darnos cuenta de que quien había acumulado tales tesoros no era hombre -o no era mujer- de tierra adentro: era, seguro, persona de la mar. Marino de agua salada, de esa agua que se ve desde su azotea pues la casa está a un tiro de piedra del océano que nos baña. Y por si fuera poco, el nombre que acunaba todo aquello nos dio la razón: "El barco", reza el título que figura como un desafío en lo que seguro es el puente de mando de la azotea. 

sábado, 26 de enero de 2019

Asientos

Algunas líneas de  las guaguas amarillas palmenses, son -al parecer- verdaderas minas de oro a tenor del número de viajeros que transportan. Podemos comprobarlo viajando desde el Cono Sur hasta La Isleta. Pasajeros y más pasajeros suben y bajan en su deseo de llegar a sus destinos. Para afrontar lo que, al parecer, es una exitosa racha en lo económico, Guaguas Municipales -nuestro Ayuntamiento, si lo prefieren- se ha apuntado a la ya famosa metroguagua. Mientras esta llega, arbitran otras soluciones de andar por casa. Como la de sustituir asientos por sitios de a pie lo cual va bien con nuestra costumbre de viajar como 'sardinas en lata'. Quizás quieran acostumbrarnos a plataformas sin asientos. ¡Qué le vamos a hacer! Al menos, podemos congratularnos, pues, algunos de estos sitios ganados, son aprovechados para viajar con cochecitos de niños o con sillas para personas que tienen dificultades para la movilidad. Gracias sean dadas, 

martes, 22 de enero de 2019

Lluvia

Dios no desampara a quien cría y aprieta pero no ahoga, nos dice el refranero. Por ello, al fin, el cielo que tan roñoso se nos mostraba, nos ha mandado la lluvia benefactora. Lluvia sin viento y sin destrozos pero con un frío de todos los demonios. ¡Pareciera que estamos en invierno si no fuera porque estamos en invierno! Un invierno del que ya nos habíamos olvidado con tantos días de sol, de ese sol del que gusta presumir a los amigos del buen tiempo. Han llegado las lluvias: se han regado las plantas y se han mojado las calles y las plazas y los coches y las gentes. Y ha cambiado nuestra percepción de la realidad viendo en el suelo mojado el reflejo de las luces blancas de las farolas y las luces de colorines de los anuncios y escaparates de los comercios. Bienvenida sea la lluvia si no viene desinquieta.

domingo, 20 de enero de 2019

La grúa

La grúa y el camión, el camión y la grúa, ambos dos, están ya en el Parque de Santa Catalina para ayudar en el montaje del escenario principal de las carnestolendas capitalinas. Podemos verlos enmarcados entre los edificios Miller y Elder con un crucero de esos enormes que últimamente nos visitan, detrás, en el muelle. Cumplirán con su misión de subir hierros y maderas pintadas que perfectamente ensambladas nos darán la impresión de vivir noches de ensueños. Una vez cumplida su tarea -múltiple tarea- harán mutis por el foro y los espectadores de espectáculos llenos de disfraces locos, músicas diabólicas y focos multicolores no tendrán para ellos ni un consuelo ni una palabra de agradecimiento. Hay trabajos que no se pagan. Los de la grúa y el camión, los del camión y de la grúa, son algunos de ellos. 

viernes, 11 de enero de 2019

Artilugio

En Vegueta, un poco más allá del Cementerio de Las Palmas, hay un edificio que dice albergar un laboratorio para no sabemos qué de calidad de la construcción. Quizás la Autoridad controla desde aquí la consistencia del hormigón, los milímetros del grosor de las tuberías, el ferruge del hierro, la dureza de los azulejos y otras cosas que andan por ahí en cualquiera de nuestras casas. En tal laboratorio, en una especie de patio del porche, hemos visto un artilugio que a lo mejor -vayamos a saber- aún continúa prestando servicio. Pudiera ser que este -el artilugio- estuviera conectado por debajo del suelo con alguna cámara llena de aparatos modernos con pantallas rutilantes y ojos escrutadores. Quién sabe. A nosotros nos llamó la atención el cacharro y por ello lo hemos traído a la consideración de ustedes.

martes, 8 de enero de 2019

Mariposa

Casi, casi, de papel es nuestra mariposa. La hemos visto en un parterre delante de la Iglesia Redonda y los lindos colores de sus alas nos llamó la atención. Había dos pero la otra estaba escondida a nuestra cámara que no a nuestra curiosidad. Nos acercamos a ellas con temor de que levantaran el vuelo pero no se movieron. Seguro que estaban calentitas en aquel lugar casi sagrado y no tenían intenciones de probar fortuna volando y volando por lo alrededores. 

sábado, 5 de enero de 2019

Baño tonificador

Papá Noel tuvo trabajo del bueno en la noche del 24 de diciembre. Visitó casas y más casas llevando regalos y juguetes para los pequeños que, sin olvidarse de los Reyes Magos que ya vendrían a su debido tiempo, les habían encargado tantísimas cosas buenas. Ya en el 25, día de Navidad, tomándose un rato de asueto bien ganado, se fue a la playa a tomar un baño tonificador y luego subió a su apartamento que está en la mismita Avenida de Las Canteras. Allí le pudimos ver nosotros con su gorro y ropas rojas, zapatos negros y guantes verdes porque el frío ¡¿frío Papá Noel?! se le había metido en el cuerpo. Nosotros le retratamos y quedamos también retratados en la instantánea. Quedó, nos parece, una bonita foto para el recuerdo.

miércoles, 2 de enero de 2019

Pino de pisos

Nuestra isla, Gran Canaria, posee una excelente colección de plantas endémicas unas y autóctonas otras, y, claro está, no faltan ejemplos claros de plantas importadas. Sin necesidad de irnos al campo, en la capital -Las Palmas- podemos disfrutar de muchas de ellas con flores hermosas unas y sin flores tan visibles otras. A nosotros nos gustan todas. Tenemos a las plantas como unos seres que nos dan muchísima satisfacción. Tal ocurre con un árbol majestuoso y que vive muchos años, que a veces no vemos aunque lo tengamos delante de nuestras narices de un porte admirable y una figura singular. Se trata de la araucaria que según leemos recibe el nombre de pino de pisos. Efectivamente, nuestro árbol que en plazas y parques (y en jardines particulares) están con nosotros para nuestro deleite presenta una sucesiva hileras de ramas, de mayor a menor, hacia los lados, según la copa sube hacia las alturas.