domingo, 28 de julio de 2024

Diminutos


Diminutos son los balcones. Pequeñas, casi diminutas, las casas. Creemos que, cuando el arquitecto que sobre el papel realizaba el barrio de Las Rehoyas en Las Palmas se encontró con que tenía tan sólo una punta de lápiz para delinear los balcones (uno por vivienda) de la calle principal y algunas adyacentes o paralelas, y así, con más voluntad que medios, siguió en su proyecto de casas baratas pequeñas a rabiar. Hoy, estas casas están llamadas a desaparecer y con ellas desaparecerán los balcones, cerrados con aluminio y cristal en un intento de agrandar cada casa, que sirviera, era un suponer, para poner la nevera, en el metro cuadrado o poco más que iban a ganar en cada caso. Se cerrará así el ciclo de unas casas pequeñas con balcones diminutos que, al igual que el nombre que la barriada tomó en sus principios -los Arapiles- quedarán con nosotros en la memoria. 

jueves, 25 de julio de 2024

Huecos


Huecos hay en la Ciudad en los que se podrían plantar a poco que hubiera voluntad de hacerlo algún aprendiz de esbelto árbol. Y no se hace, o se hace tarde cuando la memoria de los ciudadanos ya hayan asimilado la tierra sin verde alguno. A nosotros, ver la tierra, desnuda con su color tierra (valga la redundancia) nos da grima. Cuánto beneficio nos daría si plantaran aquí un árbol. ¡Aunque sea un sólo árbol! Ni por ésas. Nuestros pensamientos no llegan, no pueden llegar, a la conciencia ni a la cabeza de los responsables que nos representan. Por eso creemos que el hueco, el pobre hueco sin vegetación, no tendrá sombra de un árrbol, a lo que parece, en muchos, muchos años.   

jueves, 11 de julio de 2024

Un cubo

En un centro comercial cuyo nombre omitimos, hemos visto un cubo blanco. Tal cubo no tiene los números del 1 al 6 en sus caras por lo que no nos sirve para jugar a los dados. Tiene -eso sí- unos enchufes que sirven para recargar en los móviles y en las tables las baterías gratis. Así vemos que casi siempre el cubo está rodeado de unos fieles seguidores que esperan, pacientemente, que sus celulares estén a punto para seguir utilizándolos. Unos deben ser clientes, pensamos, al ver las bolsas que acarrean con nombres de establecimientos varios. Otros, parecen más pobres y sin hogar que encuentran acomodo en los sillones allí puestos para leer noticias o ver, no sabemos qué, en sus móviles mientras éstos recargan. Pensamos cuánto bien sería que pusieran un cubo con enchufes para repostar con energía buena y barata nuestras cabezas vacías en las que caben cientos de cosas sabias.

martes, 9 de julio de 2024

Edificio


Sabido es que un edificio es un edificio. Por ello nos ha sorprendido el cartel que en una casa, en los alrededores del Mercado de Vegueta, han puesto que no dice otra cosa. Edificio dice, en letras grandes, por si a alguien quedara dudas de que lo fuera. Lo analizamos y vemos que en letras pequeñas está también el nombre del tal edificio y, entonces, el cartel toma su forma: Edificio tal y tal. Y nos quedamos tranquilos y en paz con nosotros mismos.