miércoles, 27 de mayo de 2015

Rescatados

Recibimos sobres, muchos sobres, con propaganda electoral. Dentro de cada sobre (casi todos iguales) había otros tres sobres pequeños de distintos colores: blanco como la espuma, verde esperanza, y amarillo gofio tostado. Junto a los sobres pequeños, una lista de personas y una palabrería vana llena de promesas que -pensamos- en muchos casos van a ser incumplidas. Bla, bla, bla... lo de siempre. Prometen el sol y la luna si se tercia y no se arrugan por ello. Saben que en definitiva nadie está firmando un contrato que obligue pues la ley electoral no llega a tanto. Hastiados, tomamos los sobres y las listas y los impresos para llevarlos al contenedor de papel para que sean reciclados. Pensamos que tal vez al unirse unos y otros, los de esta formación con aquella otra tan contraria, un día surja un deseo de ofrecerse todos juntos para mejorar la vida de las gentes dejándose de banderías. Cuando íbamos a arrojarlos, al final, nos dieron pena los sobres pequeños de distintos colores, pobrecitos éstos, y los rescatamos del reciclaje. Los hemos guardado. Servirán, posiblemente, para algo. A lo mejor, para enviar un recado amistoso a algún político cercano. 

lunes, 18 de mayo de 2015

Jacarandas

Junto a la tapia del cementerio, por fuera, hay unas jacarandas que ahora en nuestra primavera canaria están en flor. Nosotros nos hemos parado a verlas, a disfrutar de su hermosura y no hemos podido dejar de admirar a los esbeltos cipreses junto a ellas. Son, pensamos, las dos caras de la verdad. Las dos orillas del ser. Aquí la vida, allá la muerte. Separadas y juntas en la tapia del camposanto que nos aguarda. Humilde la flor, elegante el ciprés. Bonitos los dos.

miércoles, 13 de mayo de 2015

Nuevo slogan

Hace años, hace cuatro años pizco más o menos, un publicista -supongo- ideó un slogan que nos ha acompañado desde entonces. Fue a partir de las últimas elecciones municipales cuando vimos aparecer en carteles, y en furgonetas y en coches al servicio del Ayuntamiento capitalino, lo que, si al principio fue visto con curiosidad, ahora, me temo, pasa desapercibido: "Vuelve a latir", nos dijeron por activa y por pasiva, entre corazones de colorines encantados de la vida.

Nos preguntamos que nuevo slogan nos dejará las elecciones de este mayo florido. No sabemos si quien pensó el anterior mensaje cree que ya la Ciudad está bien de latidos y que ha dejado atrás la 'paralís' que la tenía paralizada. Veremos. Veremos si tenemos que tragarnos otro mensajito al uso. Porque también puede ser que sea a otro y no al mismo (o a la misma) a quien el equipo ganador encargue (o tenga ya encargado) la nueva frase.  

viernes, 8 de mayo de 2015

Volvieron

Fiel a su cita volvió la rosa. Fieles, las rosas volvieron. En febrero las podaron y en mayo florecieron, y ahí están para nuestro deleite en el parque mostrando sus ropajes de variados colores, cientos de matices, olores sin cuento. Están, fieles a su cita, desplegando sus encantos en cada uno de sus pétalos. El parque, junto al Castillo, se llena con la fragancia de tantas flores en la tarde soleada y a nosotros se nos inunda el alma de sosiego y bienestar en la primavera canaria.
 

lunes, 4 de mayo de 2015

Bajo los soportales

Les vimos bajo los soportales de un cercano centro comercial. Eran, un hombre de melena larga y rubia con aspecto extranjero, una mujer joven de pelo negro y un perro. Él tocaba la guitarra y ella el acordeón; el perro, echado al lado de su ama, seguramente disfrutaba de la música. Nos paramos a verlos y seguimos con agrado los rápidos acordes que fluían de sus instrumentos musicales. Nos recordaron al folk o al country lo que nos llevó a pensar que la pareja bien podría ser de americanos, de la América profunda de los Estados Unidos, que hubieran recalado a nuestras costas. Él hablaba inglés y chapurreaba el español mientras el español de ella era fluido sin acento alguno extranjero. ¿Sería ella de aquí, canaria, española? Pudiera ser. El perro sí era canario, según dijo la joven: de Tenerife. Al oír el comentario, nuestra atención fuese hacia el animal pues siempre es bueno encontrar entre nosotros a un paisano de otras islas si además éste es un joven, bonito y tranquilo animal, según parece.